España y Marruecos, tras la visita oficial de nuestro presidente a ese país, han firmado un acuerdo bilateral según el cual los conductores marroquíes podrán ser contratados en España y trabajar sin que tengan que hacer pruebas teóricas o prácticas a la hora de canjear sus permisos en nuestro país.
El canje consiste en la homologación de un permiso de conducir por otro equivalente expedido por la Dirección General de Tráfico. Hasta ahora, los conductores con permisos marroquíes que solicitaban el canje de sus permisos de conducción por permisos españoles equivalentes de clase C, C+E, D y D+E, debían realizar las pruebas teóricas de control de conocimientos específicos vigentes en España y, además, una prueba de circulación en vías abiertas al tráfico general. Con el nuevo acuerdo se eliminan esas trabas o limitaciones.
El acuerdo celebrado responde a las peticiones de transportistas y cargadores para incorporar más conductores a un sector con escasez de trabajadores y es que, según datos aportados por la Organización Internacional de Transporte por Carretera (IRU) en 2023, en España se necesitaron entre 18.000 y 20.000 conductores de camión. Algo contradictorio, si tenemos en cuenta que el 95% de las mercancías en España se mueve en camión, concretamente a bordo de unos 560.000 vehículos pesados.
Esta escasez de conductores profesionales afecta a toda Europa, en su conjunto faltan más de 500.000 transportistas, según IRU. Por ello, una de las medidas más solicitadas en las instituciones comunitarias es simplificar los trámites para reconocer las licencias de conductores extranjeros, como está haciendo España con Marruecos.
En realidad, el Gobierno español ya había autorizado en el Consejo de Ministros del 6 de febrero esta modificación en los canjes del permiso de conducir con Marruecos. Ahora lo ha ratificado con el Ejecutivo marroquí, como ha publicado El Español.
En las referencias del Consejo de Ministros del 6 de febrero ya se explica que esta medida busca eliminar los retos existentes en materia de cobertura de vacantes de conductores cualificados para trabajar en el sector, tal y como habían solicitado representantes de las empresas españolas dedicadas al transporte por carretera, tanto de pasajeros como de mercancías.
También se especifica que esta medida se aplicará provisionalmente treinta días después de que se le notifique a la Embajada del Reino de Marruecos.
El canje consiste en la homologación de un permiso de conducir por otro equivalente expedido por la Dirección General de Tráfico. Hasta ahora, los conductores con permisos marroquíes que solicitaban el canje de sus permisos de conducción por permisos españoles equivalentes de clase C, C+E, D y D+E, debían realizar las pruebas teóricas de control de conocimientos específicos vigentes en España y, además, una prueba de circulación en vías abiertas al tráfico general. Con el nuevo acuerdo se eliminan esas trabas o limitaciones.
El acuerdo celebrado responde a las peticiones de transportistas y cargadores para incorporar más conductores a un sector con escasez de trabajadores y es que, según datos aportados por la Organización Internacional de Transporte por Carretera (IRU) en 2023, en España se necesitaron entre 18.000 y 20.000 conductores de camión. Algo contradictorio, si tenemos en cuenta que el 95% de las mercancías en España se mueve en camión, concretamente a bordo de unos 560.000 vehículos pesados.
Esta escasez de conductores profesionales afecta a toda Europa, en su conjunto faltan más de 500.000 transportistas, según IRU. Por ello, una de las medidas más solicitadas en las instituciones comunitarias es simplificar los trámites para reconocer las licencias de conductores extranjeros, como está haciendo España con Marruecos.
En realidad, el Gobierno español ya había autorizado en el Consejo de Ministros del 6 de febrero esta modificación en los canjes del permiso de conducir con Marruecos. Ahora lo ha ratificado con el Ejecutivo marroquí, como ha publicado El Español.
En las referencias del Consejo de Ministros del 6 de febrero ya se explica que esta medida busca eliminar los retos existentes en materia de cobertura de vacantes de conductores cualificados para trabajar en el sector, tal y como habían solicitado representantes de las empresas españolas dedicadas al transporte por carretera, tanto de pasajeros como de mercancías.
También se especifica que esta medida se aplicará provisionalmente treinta días después de que se le notifique a la Embajada del Reino de Marruecos.