Desde ATRAM se insistió en recordar que era necesario “solicitar expresamente” en las estaciones ITV la anotación del nuevo límite de masa máxima autorizada. Es decir, durante el primer paso de la ITV, se debía solicitar la anotación del aumento de masas, de lo contrario, posteriormente se debería gestionar como una “reforma de importancia”.
Y así está ocurriendo, la Federación Nacional de Asociaciones de Transporte de España (Fenadismer) ha señalado que el Ministerio de Industria y las ITVs complican injustificadamente a los transportistas homologar sus camiones a 44 toneladas.
Este proceso de adaptación de los transportistas para legalizar sus vehículos para transportar 44 toneladas se está encontrando con estas complicaciones por la actuación que están llevando a cabo las estaciones de ITV, bajo la directriz del Ministerio de Industria, como consecuencia de la interpretación absolutamente restrictiva e irracional que se está dando a la Orden Ministerial aprobada el pasado mes de Julio (Orden PJC/780/2025, de 21 de Julio).
Lo que se recoge en la Disposición Transitoria segunda de la referida Orden es que, a solicitud del titular del vehículo, durante su primer paso por inspección técnica periódica, se anotarán los nuevos límites de masas máximas autorizadas mediante diligencia en el Registro de Vehículos de la Jefatura Central de Tráfico y en las tarjetas de inspección técnica en soporte papel cuando estos nuevos límites sean iguales o inferiores a las correspondientes masas máximas técnicamente admisibles indicadas en las tarjetas de inspección técnica de los vehículos.
Por tanto, si en el primer paso por la ITV, el titular del vehículo, no solicita la anotación, a partir de ese momento ya no se realizará una simple diligencia en la Tarjeta de Inspección Técnica, sino que, a posteriori, la anotación del nuevo límite se hará como una “reforma de importancia”. Esto implica:
Además, los transportistas también se están encontrando con el rechazo en la homologación de cientos de semirremolques para poder transportar las 44 toneladas por no cumplir supuestamente las distancias entre ejes; en algunos casos por diferencias inferiores a un centímetro respecto de lo que establece la normativa técnica.
Esta serie de despropósitos ha llevado a solicitar al Ministerio de Industria, por parte de las asociaciones de transportistas, una reunión urgente para plantear todas las dificultades y trabas que están surgiendo y buscar una solución. El encuentro está previsto para este viernes 19 de diciembre y será clave para clarificar los criterios de aplicación de la normativa y evitar que el proceso de adaptación a los nuevos tonelajes se convierta en una carga adicional para las empresas de transporte.
Y así está ocurriendo, la Federación Nacional de Asociaciones de Transporte de España (Fenadismer) ha señalado que el Ministerio de Industria y las ITVs complican injustificadamente a los transportistas homologar sus camiones a 44 toneladas.
Este proceso de adaptación de los transportistas para legalizar sus vehículos para transportar 44 toneladas se está encontrando con estas complicaciones por la actuación que están llevando a cabo las estaciones de ITV, bajo la directriz del Ministerio de Industria, como consecuencia de la interpretación absolutamente restrictiva e irracional que se está dando a la Orden Ministerial aprobada el pasado mes de Julio (Orden PJC/780/2025, de 21 de Julio).
Lo que se recoge en la Disposición Transitoria segunda de la referida Orden es que, a solicitud del titular del vehículo, durante su primer paso por inspección técnica periódica, se anotarán los nuevos límites de masas máximas autorizadas mediante diligencia en el Registro de Vehículos de la Jefatura Central de Tráfico y en las tarjetas de inspección técnica en soporte papel cuando estos nuevos límites sean iguales o inferiores a las correspondientes masas máximas técnicamente admisibles indicadas en las tarjetas de inspección técnica de los vehículos.
Por tanto, si en el primer paso por la ITV, el titular del vehículo, no solicita la anotación, a partir de ese momento ya no se realizará una simple diligencia en la Tarjeta de Inspección Técnica, sino que, a posteriori, la anotación del nuevo límite se hará como una “reforma de importancia”. Esto implica:
- Un coste mayor (el doble que una diligencia; a partir de 40 euros).
- Se precisará un informe de conformidad del fabricante o de un laboratorio, con la correspondiente carga económica y el tiempo para su emisión que conlleve.
Esta serie de despropósitos ha llevado a solicitar al Ministerio de Industria, por parte de las asociaciones de transportistas, una reunión urgente para plantear todas las dificultades y trabas que están surgiendo y buscar una solución. El encuentro está previsto para este viernes 19 de diciembre y será clave para clarificar los criterios de aplicación de la normativa y evitar que el proceso de adaptación a los nuevos tonelajes se convierta en una carga adicional para las empresas de transporte.


